Fernando Ávila, director general de Lincoln México, comparte la dirección que la marca está tomando en el país

Fernando Ávila, director general de Lincoln México, platica con Business Conexión de la estrategia corporativa de la firma de vehículos de lujo del fabricante estadounidense Ford Motor Company.

Ávila, un personaje de renombre en la industria automotriz en México por sus 40 años de trayectoria en las filas de Ford de México, dirige una marca que durante los últimos tres años ha alcanzado un 34% de crecimiento en México, que cuenta con 19 concesionarios en toda la República a través de los cuales se comercializaron 2,371 vehículos en 2016 y que estima tener un crecimiento de 10% para 2017, año que además estará marcado por el esperado regreso del célebre Lincoln Continental.  Tras 14 años de ausencia, el sedán insignia de la marca americana llegará a los concesionarios este próximo otoño, no sólo con miras al mercado de Norteamérica, sino también al mercado asiático, donde Lincoln se ha convertido en una de las marcas de lujo de más rápido crecimiento.

La marca Lincoln es manejada en Baja California por Surman, uno de los grupos automotrices más importantes en la República con más de 30 años de trayectoria y presencia en Sonora, Coahuila, Durango, Nuevo León, Chihuahua y Ciudad de México.

De acuerdo con Fernando Ávila, Grupo Surman se ha caracterizado por su dinamismo, entusiasmo y deseo de hacer crecer la marca Lincoln, lo cual se hace visible con las obras de remodelación que pronto llegarán a la agencia de esta marca en Tijuana, para traer un nuevo concepto en punto de venta que tienen su origen en lo que la marca hizo en China, orientado a que el potencial comprador experimente  un ambiente amable y relajado de compra. “Vamos a desaparecer la tradicional oficina con escritorio para dar paso a un concepto de hospitalidad, donde el cliente sentirá que está entrando a una agencia no para hacer una transacción sino para recibir una atención cálida y humana que lo haga adquirir nuestros vehículos”, comparte.

En cuanto a la diferenciación de la marca, Ávila detalla que ésta radica en la integración de lujo, confort, potencia y tecnología de última generación que brindan una experiencia de manejo personalizada y envolvente; “Manejamos pocas versiones y modelos pero con un máximo grado de equipamiento a un precio que lo justifica plenamente”, añade.

“Lo que la gente puede esperar de los vehículos Lincoln es una gran sorpresa y para conocer esa sorpresa hay que manejarlos”, expresa el director de la marca, y es que los diseñadores de los automóviles Lincoln siempre rompen paradigmas; esta vez han eliminado la palanca de velocidades y colocado el selector de velocidades de la transmisión en una serie de botones ergonómicos en el panel de instrumentos central. La eliminación de la palanca libera espacio en la cabina, creando vehículos únicos en su clase. Otra característica que diferencia a los vehículos Lincoln es su suspensión adaptativa para un manejo suave y seguro, gracias a un conjunto avanzado de sensores que escanean el camino cada 2 milisegundos ajustando rápidamente la suspensión y la amortiguación de cada una de las ruedas para asegurar que el vehículo y la carretera estén en armonía.

Otro distintivo de Lincoln son sus coberturas que protegen a sus clientes de manera indistinta. “Nuestra garantía cubre el uso de vehículos durante 4 años u 80,000 kilómetros, lo que ocurra primero, misma que los clientes pueden disfrutar en toda la República Mexicana así como en EE.UU., es decir, un vehículo comprado en México podrá recibir el servicio técnico, la atención, protección y soporte que necesite en EE.UU. y viceversa, un vehículo Lincoln adquirido en EE.UU. puede recibir los mismos beneficios en México”.